Feb-2011
El Oso de anteojos
Tremarctos ornatus
El oso de anteojos, Tremarctos ornatus, es actualmente la única especie de oso asociada a la cordillera de los Andes y presente en América del Sur. También es el único representante de la sub-familia Tremarctinae.
Clasificado vulnerable por el UICN, su conservación es una prioridad para los países donde se encuentra.
Por lo tanto, un programa importante de conservación esta en efecto desde algunos años, con el objetivo principal de reintroducir los individuos mantenidos ilegalmente en cautividad. La fragmentación y la destrucción de su hábitat son las principales amenazas para el oso de anteojos. El tráfico ilegal llega en tercera position.
De tamaño mediano comparado a otras especies de osos (de 1,3m a 2,1 m, con un peso de hasta 200 kg para los machos mas grandes), posee un pelaje negro uniforme con un hocico marrón y unas manchas redondeadas de color crema alrededor de los ojos que a veces llegan hasta la garganta y el pecho. El cuerpo de este oso recuerda al de los grandes primates; se ve una convergencia evolutiva, signo de la adaptación de la especie a su ambiente de vida (bosques húmedos y secos). Es un animal diurno y solitario, las madres pueden ser acompañadas de 1 o 2 oseznos. Es omnívoro pero se alimenta principalmente de productos vegetales (bromeliáceas, frutos, hojas…).
Una vez mas, esta muy bien adaptado ya que posee patas y garras que le permiten trepar fácilmente a los arboles donde encuentra una gran parte de su alimentación. También construye camas de ramas tanto en el suelo que en los arboles para alimentarse y descansar. Es capaz de levantarse sobre sus patas traseras para observar sus alrededores o perecer amenazante cuando se siente en peligro. Finalmente, el oso de anteojo no hiberna.
Años atrás esta especie estaba cazada intensamente por el Hombre (diversión, superstición, …), sin embargo muchas etnias lo consideraba como un animal sagrado, lo que en algunos casos evito que sea cazado. Hoy en día protegido, tomamos en fin conciencia de su importancia ecológica como dispersor de semillas, polinizador y depredador. Además, cuando se alimenta, abre grandes espacios en el bosques lo que permite dinamizar la vegetación dejando espacio a nuevas especies para crecer.
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